La Comunidad Agrícola de Diaguitas Huasco Altinos difundió un comunicado en el que si bien valoran el procedimiento sancionatorio de la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) en contra de la compañía Minera Nevada SpA, por el proyecto Pascua Lama, indicaron tener “la certeza” de que se trata sólo de un triunfo “pasajero”,
“La amenaza que representan este tipo de proyectos mineros altamente contaminantes sobre ecosistemas frágiles, únicos y de gran valor para sus habitantes, continúa, amparada por la legislación ambiental chilena, que permite su ingreso al país, y en muchos casos, como éste, las sanciones interpuestas llegan cuando el daño ambiental es ya irreversible. En efecto, el daño originado por Pascual Lama ya está hecho; los glaciares, el agua y las vegas alto andinas no volverán a su estado original”, expresa el comunicado.
“Alertamos sobre la necesidad de no bajar la guardia ante esta noticia que ha salido a la luz p
ública con un titular que puede dejar a muchos ciudadanas y ciudadanos de este país contentos, conformes y tranquilos, pero que debemos analizar considerando la experiencia que nos deja la irrupción de otros proyectos de la misma naturaleza. Lo que está pasando con las alianzas entre gigantes mineros como Gold Corp y Teck, quienes han decidido enterrar el proyecto El Morro pero reactivándolo como “Proyecto Nueva Unión”, con los mismos dueños, en el mismo lugar, pero con otro nombre, es un claro ejemplo de ello”, añade el texto.
Un punto importante que se toca en el comunicado es la existencia de otro proyecto minero cerca de Pascua Lama: la mina El Encierro, que está a punto de ser de propiedad de Antofagasta Minerals (Luksic) junto a su aliada la empresa Barrick Gold, ambos titulares y con un extenso prontuario de contaminación ambiental, tanto a nivel nacional como internacional.
“La posibilidad de una fusión entre estas empresas mineras, para impulsar un nuevo proyecto en el territorio diaguita, no sería nada extraño e incluso predecible”, manifiestan desde la comunidad.
Finalmente, el comunicado se refiere a las declaraciones del director ejecutivo de Barrick Chile, René Muga, donde anunció que en respuesta a esta sanción, se está evaluando otro posible desarrollo minero subterráneo en la zona, el que ya ha sido publicitado por la propia empresa entre los habitantes del Valle del Huasco, casa por casa, como un hecho consolidado.
“Más aún, el propio superintendente de Medio Ambiente, Cristián Franz, precisó en medios de comunicación que si la empresa Barrick Gold decide replantear el proyecto bajo modalidades diferentes a las actuales, como la minería subterránea, ‘está en su derecho de elaborar un estudio de impacto ambiental, ingresarlo al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental y como resultado de ese proceso, si llegan a tener una RCA favorable, efectivamente podrán implementar ese proyecto’. Por lo que el cierre de todas las instalaciones ejecutadas por Pascua Lama, que la sanción plantea como una clausura total y definitiva, es una situación no solo temporal sino que ilusoria, que no asegura la expulsión de Barrick del Valle de Huasco, ni tampoco garantiza la conservación de los ecosistemas o que el agua limpia deje de estar en riesgo vital en territorio diaguita”, puntualizaron.
“Los gigantes mineros no abandonarán el Valle del Huasco mientras la ley ambiental chilena persista en admitir sus flagelos sin mayores miramientos u exigencias, mientras ella no contenga acciones efectivas para proteger y conservar verdaderamente el agua y los bienes comunes”, concluyeron.