Antiguamente no existían en nuestro país
tantos juegos de azar, comoocurrehoy en día; por eso, los sueños
de los chilenos estaban centrados solamente en la
Polla Chilena de Beneficencia y en la Lotería de
Concepción que, alternadamente, cada domingo, repartíanmillones de pesos a los afortunados
ganadores que le apuntaban
al “gordo”, como se le decía al númeroya los boletos premiados.
Varias veces el primer premio de uno u otro concurso cayó en Vallenar, cambiándole la suerte a
los felices ganadores. Curiosamente, no recuerdoque
se diera una suerte de envidia entre los vallenarinos respecto de los ganadores,
si no que,por el contrario,
se expandía una
verdadera y sana alegría
de queun coterráneo cambiara su estatus económicoy, al mismo tiempo, pusiera el nombre de Vallenar en la
portada de los diarios nacionales.Así ocurrió, por ejemplo,
cuando la suerte le sonrió al querido
Chico Cataldo que tenía sunegocito en Sargento Aldea, casi al llegar a Brasil que,
para celebrarlo, se dio un festín junto a su familia enun céntrico restaurante de la ciudad.
Revisando mis apuntes, observo que el 12
de junio de 1966,
o sea, un día como hoyde hace 54 años, la diosa Fortuna cayóen la capital del Huasco, favoreciendo
al número 39248que recibió la entonces suculenta suma
de 500 mil escudos. El premiado fuevendido en la agencia de la señora Noelia
Diaz de Alvarez, ubicada en Prat 1266.
Cabe consignarque, curiosamente, el primer “gordo” caído en Vallenartambiénocurrió un12 de junio, pero de 1961, favoreciendo al número 04122 que recibiólasuma
de 200 mil escudos, tal como lo consigna la prensa de aquel
entonces ycomo, seguramente,tambiénlo
ha de recordar el suertudo vallenarino que no fue
identificado por el diario local, como sí lo hizo
con Fernando Vergara funcionario del Banco del
Estado que tenía en su poder un par de vigésimos con
el numero de la suerte.
En conclusión, siendo hoy 12 de junio, hay que puro apostar a la diosa Fortuna que otra vez se podría acordar de Vallenar, claro
que ahora conun venido a menos juego de la PollaChilena de Beneficencia.