Desde el 1 de marzo de 2016 que entró en vigencia la Ley de Inclusión Escolar -que pone fin al lucro, al copago y la selección- a la fecha 47 establecimientos educacionales particular subvencionados de Atacama, con una matrícula total de casi 20 mil estudiantes, optaron por constituirse en entidades sin fines de lucro y entrar paulatinamente a la gratuidad.
Así lo informó el seremi de Educación Raúl Collado Contreras, quien hizo un positivo balance sobre los avances de esta iniciativa que forma parte de la reforma impulsada por la Presidenta Michelle Bachelet Jeria, explicando que hasta el pasado 1 de enero, los sostenedores tenían plazo para constituirse como entidades sin fines de lucro, y de esta manera, poder seguir recibiendo subvención escolar.
La autoridad agregó que “en Atacama de 50 establecimientos particular subvencionados, 47 adscribieron a la gratuidad, 2 decidieron transformarse en particular pagados y uno no presentó ningún antecedente por cambio de financiamiento y esperamos que tome la decisión a la brevedad. Esto sin duda es una gran noticia para las familias de los casi 20 mil estudiantes que forman parte de la comunidad educativa de estos 47 establecimiento”.
“Con la Ley de Inclusión Escolar dimos un gran paso para que Chile al fin tenga un sistema educativo más moderno, de calidad, gratuito y sin discriminación. Desde la entrada en vigencia de la Ley de Inclusión Escolar, el 1 de marzo de 2016, todos los recursos que aporta el Estado deben destinarse a fines educativos y desde el 1 de enero de 2018, también los recursos que aportan las familias a través del copago que bajará paulatinamente hasta llegar a cero”, aclaró el seremi del ramo.
“Este resultado nos tiene muy contentos porque sin duda, estas cifras son una muy buena noticia para las familias. Debemos destacar que tal como lo señaló nuestra ministra Adriana Delpiano, mucha gente señaló que esto iba a ser un desastre y las cifras desmienten esas aprensiones. Lo más significativo es que el 2 de enero se terminó el lucro en la educación”.
Según precisó Collado, que la Ley no elimina la posibilidad de que los padres hagan aportes al colegio porque el ser “gratuito, sino que no es condición pagar una colegiatura para estar en el establecimiento. Lo que se establece es que los centros de padres pueden tomar decisiones y juntar recursos para muchas actividades de mejora o diversas actividades extracurriculares”.
Respeto al Sistema de Admisión Escolar, Raúl Collado indicó que en Atacama comenzará a implementarse este 2018, para entrar en vigencia desde el 2019, año que solo se aplica en prekínder, kínder, primero y séptimo básico, y primero medio, y el 2020 en todos los niveles. “El Sistema de Admisión Escolar entrega la posibilidad a todas las familias para elegir el establecimiento cuyo proyecto educativo los identifica, sin discriminaciones arbitrarias, con lo que hemos dado un paso más en pos de la equidad porque nuestros alumnos no podrán ser seleccionados por razones socioeconómicas, religiosas, situación familiar, rendimiento académico, o cualquier otro criterio.
Desde el 1 de marzo de 2016 que entró en vigencia la Ley de Inclusión Escolar -que pone fin al lucro, al copago y la selección- a la fecha 47 establecimientos educacionales particular subvencionados de Atacama, con una matrícula total de casi 20 mil estudiantes, optaron por constituirse en entidades sin fines de lucro y entrar paulatinamente a la gratuidad.
