El Colectivo en Defensa del Medio Ambiente de
Atacama (CODEMAA), plantea su rechazo al acuerdo comercial TPP-11, que ahora se
llama Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico - CPTPP.
El TPP-11 es un acuerdo comercial
multilateral celebrado bajo una supuesta promesa de mayor crecimiento económico
y prosperidad para Chile. Sin embargo, este acuerdo es una entrega de la
soberanía nacional a las grandes empresas transnacionales, que obstaculizaría
el desarrollo de Chile y limitaría nuestros derechos sociales.
Sus promotores plantean que este tratado facilita la
participación chilena en el comercio internacional, aumentando el acceso de
productos nacionales a mercados globales y atrayendo más inversión extranjera.
Pero Chile ya tiene tratados con todos los países integrantes del acuerdo, por
lo cual firmarlo no abrirá nuevos mercados ni cambiará significativamente las
oportunidades para las empresas chilenas. Incluso, las estimaciones del propio
Gobierno dicen que elTPP-11, en el mejor de los casos,
generaría un crecimiento económico adicional de apenas un 0,12%.
Las ventajas del TPP-11 son
bastante menores pero significa una pérdida de soberanía tremenda. Las reglas
de este tratado se hacen cumplir a través de tribunales de arbitraje
internacional, y les da una jurisdicción por sobre las cortes nacionales. Así,
una empresa transnacional que ha invertido acá puede demandar al Estado chileno
en el extranjero, si es que implementa una regulación pública que afecta sus
expectativas de ganancias. Según diversos estudios académicos, estos tribunales
tienen un claro sesgo pro-empresarial donde han fallado 72,5% del tiempo en
contra de los Estados.
La discusión del sueldo
mínimo que se discute en el Congreso, es uno de los ejemplos
hasta donde podría llegar el poder de una empresa, al negarse a aceptarlo y
demandar al Estado. Otro ejemplo más visible es lo que pasó con los
FONDOS BUITRES en Argentina, donde el estado tuvo que cancelar millonarias
sumas a empresas especulativas ordenadas por un tribunal de Estados Unidos.
Los árbitros internacionales, cuyo poder aumentaría con
el TPP-11, ya han fallado en contra de Estados por
intentar regular empresas que contaminan el medio ambiente, por ejemplo en
Alemania con las termoeléctricas. También hay demandas contras Estados que han
querido hacer un cambio profundo en sus sistemas de pensiones al sacar a los
privados del negocio. En Bolivia, estos árbitros están definiendo si el Estado
deberá indemnizar a las AFP, para poder pasar a un sistema de pensiones
colectivo. Este tipo de situaciones las podríamos vivir en Chile en caso de que
se firme el TPP-11.
Este acuerdo transnacional, del que Chile está por formar
parte,expone sus recursos naturales, la
calidad de su medioambiente, la calidad de vida de sus habitantes y el
bienestar de sus trabajadores.
Es por eso que exigimos
al Poder Ejecutivo y Legislativo (Senado) que respeten a la gente que habita
este país y que rechacen elTPP-11 para defender nuestro
medio ambiente, calidad de vida y nuestros recursos naturales.Por
eso invitamos a todas y todos a informarse sobre este nefasto acuerdo,
accediendo a www.chilemejorsintlc.cl.